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18/5/12

JULIETA VINAYA: "...Tuve que elegir entre morirme o luchar..."



FUENTE:noticias valle medio
Julieta Vinaya, madre de Atahualpa Martínez, joven asesinado en Viedma acompaña a Gualberto Solano en la búsqueda de Daniel  en Choele Choel y Sergio Heredia, tomaría el caso ocurrido hace cuatro años en la capital rionegrina.
Su figura pequeña, ubicada en un rincón de la carpa que ocupa la familia de Daniel Solano. No delata a una mujer que desde hace casi cuatro años busca incansablemente a el o los asesinos de su hijo Atahualpa Martínez. “Una madre está preparada para tener a sus hijos, criarlos, darles de comer…pero no para enterrarlos”, afirma con vehemencia Julieta.

 Con tono pausado, y la mirada de quien hace tiempo busca respuestas a sus preguntas empezó su relato, “cuando me arrancaron a Ata, me encontraba en Rosario, se cumplían 80 años del nacimiento del Che, diferentes organizaciones sociales se reunirían allí y mi objetivo, además de participar del evento era conseguir una beca a mi hijo que quería estudiar medicina en Cuba. Entonces recibí una llamada de mi familia que debía volver a Viedma, porque mi hijo habría sufrido un accidente, era lo que pensaba encontrar. Pero cuando llegué a Buenos Aires mis familiares estaban en Retiro, yo pensaba encontrarlo en el Hospital. Pero una de mis hermanas me dijo que lo habían matado”. En el momento en que Julieta recibió esa noticia y llegó a la casa funeraria no entendía que es lo que sucedía. “Pensé…está durmiendo, pero no lo habían asesinado con un disparo en la espalda, pero no murió inmediatamente, sino que agonizó durante dos horas hasta que lo llevaron al lugar donde fue encontrado”

Julieta Vinaya ha recorrido un largo camino, si bien no ha encontrado a quienes en sus palabras “le arrancaron” su hijo, si se ha conectado con familiares de otros chicos muertos en Río Negro, cuyo número asciende a 100, que cada vez que pueden la acompañan en las marchas que realiza en la capital provincial. “Tenía dos opciones, morirme o luchar, elegí la segunda, para que mi hijo descanse en paz y para que quienes lo hicieron paguen su crimen con la cárcel y nunca más vuelvan a quitarle la vida a nadie, porque además de matarlo a Ata, destruyeron mi familia”, indica Julieta.

A poco de cumplirse cuatro años del asesinato de Atahualpa hay pocas precisiones, “Sergio me dijo que va a analizar mi caso, porque al igual que en el caso de Daniel se han cometido muchísimas irregularidades”, señaló Vinaya

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